La mayoría de vosotros recordaréis a Daniela Blume, la concursante con un aspecto un tanto descuidado de Gran Hermano VIP, sobre todo por su paso por el programa Crónicas Marcianas y es que el programa presentado por Xavier Sardá que en un principio parecía ser el salvador de la televisión ante Pepe Navarro se convirtió en el máximo representante de la zafiedad y eso que Javier siempre me ha caído muy bien.
En él todo el mundo se peleaba a diario, se aireaban trapos sucios y se despelotaban. Entre tanto despelote llegó Daniela Blume, una jovencísima chica de apenas 20 años que por aquel entonces estaba mucho más arreglada y bronceada que ahora y que además solía enseñarnos el potorro, completamente depiladito. Es un claro ejemplo del tipo de mujeres que nos gusta a los hombres, con carnes por todos lados y con cara de vício.

Desde aquí queremos hacer un homenaje a la belleza natural, a ese culo forjado por los dioses y esas tetas sin nada de silicona pero grandes, redondas y desafiantes de la gravedad.